
¿Cómo me puedo volver más independiente y cuándo es importante que me apoye en otras personas?
¿Qué es la independencia?
La independencia se puede entender como la capacidad de cuidar de ti sin ayuda de nadie.
Ser independiente también significa poder pensar por tu cuenta.
Esto quiere decir cubrir tus propias necesidades, tomar tus propias decisiones, resolver tus propios problemas y, conforme creces, cubrir tus propios gastos.
En las sociedades occidentales, cuando las personas jóvenes pasan a la adultez suelen estar impacientes por alcanzar la independencia en todas estas áreas.
Sin embargo, es más útil y efectivo pensar en la independencia de manera más flexible.
Cuándo buscar ayuda o colaboración
Si te fracturas un tobillo, ¿tratarías de curarlo por tu cuenta? Si tu jefe te asigna un proyecto que está pensado para hacerse en equipo, ¿tratarías de hacerlo sin colaborar con nadie?
En estos ejemplos, resolver los problemas por tu cuenta no parece realista ni efectivo. A través de estos casos, podemos entender la independencia de forma distinta.
Por ejemplo, en el caso del tobillo fracturado, independencia podría significar encontrar al médico que te tratará y, eventualmente, pagar tú la consulta.
En el ejemplo del proyecto en equipo, independencia podría significar identificar con quiénes trabajar y completar de forma responsable tu parte del trabajo.
Presión social
La otra cara de la moneda de la independencia tiene que ver con las normas culturales y la presión de pares.
Las decisiones no se toman en el vacío. Vivimos en un entorno donde están nuestros grupos sociales más inmediatos, nuestra comunidad y la sociedad en su conjunto.
¿Qué tanto de tu comportamiento está influenciado por esos grupos?
Imagina que es sábado por la noche y todas tus amistades más cercanas van a ir a una fiesta, pero tú tienes examen el lunes y todavía no empiezas a estudiar. ¿Qué tan fácil es para ti no ir a esa fiesta?
¿Y si solo una de tus amistades irá a la fiesta, pero otras tres piensan quedarse en casa a estudiar?
Si te gustan los deportes universitarios, tal vez apoyes a los equipos de tu escuela. Si te cambiaras a una escuela diferente, ¿qué tan probable sería que siguieras apoyando a los mismos equipos?
Aprender a priorizar
Dado todo lo anterior, ¿cómo saber cuándo priorizar la independencia en vez de pedir apoyo a otras personas (o simplemente dejarse llevar por la corriente)?
Conecta con tus metas y valores (¿Qué son los valores y en qué se diferencian de las metas? What Are Values, and How Are They Different From Goals?). ¿Qué tan importante es priorizarlos en una determinada situación?
Probablemente tus amistades y seres queridos se sienten bien de apoyarte a veces (tal vez tú también te sientes bien cuando les brindas apoyo). ¿Cómo podría afectar su relación si rechazas su ayuda? Puede que a veces valga la pena hacerlo y otras no.
Piensa en las personas, la historia y las variables de una determinada situación. Trátate con justicia a ti y a las demás personas involucradas. ¿Cuál es el mejor resultado para ti?, ¿cuál es el mejor resultado para las demás personas?, ¿hay algún punto intermedio que podría beneficiar a ambas partes ?
Pregúntate, ¿cuánto de mi necesidad de ser independiente tiene que ver con mi ego?
Pregúntate, ¿cuánto de mi necesidad de que otras personas me apoyen tiene que ver con mis inseguridades?
Conclusiones
Como regla general, si a menudo te inclinas hacia uno de los dos lados (casi siempre hacia la independencia o casi siempre hacia la dependencia) podría ser útil que de vez en cuando te inclines hacia el lado contrario.
La vida se trata de encontrar equilibrio y de ser flexibles.
Cuando estés ante la disyuntiva de decidir si priorizar una fiesta o quedarte a estudiar, enfócate en tus propias metas, valores y necesidades. Tus amistades tienen sus propias prioridades.